Como ya ha sucedido en anteriores ocasiones los comicios para renovar la gubernatura en el Estado de México se plantean como un laboratorio electoral previo la votación del cambio presidencial del 2024.
El 4 de junio es la fecha determinada para la elección estatal, en la que se anticipa una cerrada votación entre el candidato del PRI y el de Morena, ambos con partidos aliados que pudieran significar el triunfo.
Alfredo del Mazo, actual mandatario mexiquense no ha definido hasta donde está decidido hacer todo lo posible para que su partido el PRI se mantenga en el poder y no le entregue la plaza a Morena como recién sucedió en Hidalgo, entidades en los que sólo han gobernado priistas.
Por parte del PRI se disputan la candidatura el secretario de Gobierno Ernesto Nemer Álvarez; la ex secretaria de Desarrollo Social local, Alejandra del Moral; Ana Lilia Herrera, diputada federal, y Ricardo Aguilar Castillo, expresidente estatal del tricolor.
El PAN pretende alcanzar la candidatura con la alianza del PRI y PRD, para poner a Enrique Vargas, actual diputado local y expresidente municipal de Huixquilucan, pero se antoja difícil que el priismo de Atlacomulco, dominante en el estado, le seda el lugar, por lo que el panismo pudiera decidir finalmente ir solo, pues piensan que Vargas es un sólido prospecto.
También el Movimiento Ciudadano percibe oportunidades de triunfo con el Senador Juan Zepeda Hernández, sin embargo, entre más candidatos haya se favorece a Morena.
El partido en el Gobierno Federal cuenta con fuertes candidatos como lo son Delfina Gómez, titular de la SEP y candidata a la gubernatura en los comicios pasados; Horacio Duarte, director de aduanas, y el senador Higinio Martínez, curiosamente todos del grupo Texcoco.
Si el priismo nacional sumado al estatal decide echar toda la carne al asador, podría dar una dura batalla al crecimiento electoral de Morena y mantener para el tricolor la llamada “Joya de la Corona”, pero sin unidad ni eficiente organización electoral Morena pudiera sumar a su causa la más codiciada gubernatura del país. Veremos.
SUSURROS
Tanto concentra el Estado de México la atención política nacional que hasta allá fueron el domingo pasado los tres más fuertes suspirantes de la presidencia de la República por Morena: Claudia Sheinbaum Pardo, Marcelo Ebrard Casaubón y Adán Augusto López Hernández.
El llamado en el evento en mención fue el de unidad, porque mucho la necesita el partido guinda, pues un desmembramiento de nivel podría poner en entredicho el triunfo electoral, hoy por todos augurado.
Se sabe que el PRI también busca reposicionarse en los comicios del 2024 por impulso del expresidente Enrique Peña Nieto, pero si pierden las elecciones estatales del 2023, nada podrían hacer para el 2024. Así las cosas.