Este mes de marzo de 2024 se conmemora el 30 aniversario luctuoso de la directora teatral y cinematográfica, escritora, actriz y activista Nancy Cárdenas, quien falleció el 23 de marzo de 1994, por lo que este año se realiza un homenaje encabezado por la UNAM, el CITRU e instituciones culturales de Coahuila (su terruño), bajo el título “Una guerrillera disfrazada de artista”.
Nancy fue la primera mujer mexicana en asumir su identidad homosexual en cadena nacional en dos programas de televisión abierta –frente al periodista Jacobo Zabludovsky– y luchó continuamente para defender los derechos humanos de la comunidad hoy llamada LGBTQ+.
Cárdenas fue también la primera artista teatral que escenificó obras sobre la diversidad de la naturaleza humana como “Los chicos de la banda” (1974), “Las amargas lágrimas de Petra Von Kant” (1980) o “El día en que pisamos la luna” (1981). Además, Nancy se atrevió a teatralizar la tragedia del VIH cuando la mortal enfermedad representaba también un cruel estigma social, en obras como “Sida, así es la vida” (1991).
Nacida en Parras, Coahuila, el 29 de mayo de 1934, Nancy Cárdenas estudió el posgrado en letras en la UNAM, institución donde también se desempeñó como locutora en Radio UNAM al lado de su inseparable amigo Carlos Monsiváis, fue coordinadora del Cine Club de la UNAM y también destacó como integrante del movimiento estudiantil de 1968.
Desde muy joven, Nancy fue una mujer inquieta y valerosa que no se arredró al hablar abiertamente de su lesbianismo, lo cual la llevó a conformar la primera asociación de personas LGBTQ+ en México llamada FLH (Frente de Liberación Homosexual) en 1970.
Cárdenas fue censurada en muchas ocasiones, recibió amenazas personales y enfrentó daños intencionales en su casa y su automóvil cuando estrenó “Los chicos de la banda” en el Teatro de los Insurgentes, pero ninguna de esas circunstancias evitó que siguiera adelante con sus proyectos artísticos en el teatro, la literatura y el cine.
En el ámbito cinematográfico, Nancy dirigió la película “México de mis amores” (1979), un documental sobre el cine mexicano basado en textos de Monsiváis, que se proyecta este mes en la sala Julio Bracho a cargo de la Filmoteca de la UNAM. Sin embargo, su pasión fue el teatro donde desempeñó distintos roles: actriz, traductora, escritora, directora y productora en innumerables montajes teatrales.
Cárdenas realizó su posgrado en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM donde defendió la tesis titulada “Aproximaciones al teatro de vanguardia” (1965), estudio enfocado a analizar las aportaciones de Samuel Beckett, Eugene Ionesco y Arthur Adamov entre otros artistas europeos que revolucionaron las artes escénicas con sus propuestas de teatro del absurdo. La tesis se puede localizar en la plataforma TESIUNAM.
Además, la parrense realizó estudios de arte dramático y cine en la Escuela Nacional de Cine, Televisión y Teatro en Lodz, Polonia, y en la Universidad de Yale de los Estados Unidos. También fue becaria del Centro Mexicano de Escritores de 1968 a 1969. Y a partir de 1970 se dedicó en cuerpo y alma al teatro, dirigiendo múltiples proyectos escénicos.
Nancy hizo un paréntesis en su brillante trayectoria teatral en la Ciudad de México para regresar a su terruño donde encabezó la Compañía Estatal de Teatro del Estado de Coahuila en 1980. En esta etapa, Cárdenas realizó el montaje de dos piezas de drama contemporáneo europeo: “Casa de muñecas” de Henrik Ibsen, y “El jardín de los cerezos” de Antón Chéjov. Estas piezas formaron parte de la temporada inaugural del Teatro de la Ciudad Fernando Soler en Saltillo, Coahuila. Para realizar ambos montajes, la artista desarrolló unos talleres de teatro veraniegos en los cuales consolidó la carrera de actores locales como Jesús Valdés, Sonia Salum y René Gil, y descubrió nuevos talentos que hoy son primeros actores del teatro de Coahuila como Marissa Vallejo y Mabel Garza.
La lista de las obras teatrales que Nancy Cárdenas dirigió y que se volvieron éxitos de taquilla incluye: “El cántaro seco” (1960), “El difunto y picnic en el campo de batalla” (1961), “La vida privada del profesor Kabela” (1963), “El efecto de los rayos gamma sobre las caléndulas” (1970); “Aquelarre” (1972) también premiada por mejor dirección escénica; “Cuarteto”(1974), “Y la maestra bebe un poco”, “La isla de Athol Fugar” (1975), “Misterio Bufo” (1978), “Diálogos de refugiados” (1978), “La Dorotea” (1978), “Claudine en la escuela” (1979), “La hiedra” (1979), “Si todos los hombres del mundo” (1979), “Los soles truncos” (1979), “Pigmalión” (1980), “Pedro Páramo”, “Aprendiendo a ser señora” (1982), “Las hermanitas de Acámbaro” (1983), “Sangre de mi sangre, el caso Flores Alavez” (1984), El pozo de la soledad” (1988), “Sexualidades I y II” (1992) y “Quisiera arrancarme el corazón” (1992).
Nancy Cárdenas recibió en 3 ocasiones el premio a la mejor dirección de escena por la Asociación Mexicana de Crítica Teatral (1970, 1972 y 1974) así como el Heraldo a la mejor dirección teatral en 1980.
La parrense también publicó algunos libros de poesía en los que expresaba sus sentimientos amorosos dedicados, por supuesto, a las mujeres de su vida. Su volumen “Cuadernos de amor y desamor” sirvió como base para el homenaje realizado en la sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes cuando se cumplió una década de la muerte de Nancy, el 23 de marzo de 2004. En este evento participaron Carlos Monsiváis y las actrices Carmen Montejo, Blanca Guerra, Pilar Pellicer, Jacqueline Andere y Dunia Zaldívar. En aquella ocasión Monsiváis recordó el sobrenombre que le puso a su amiga: “Parras Atenea”.
Mis recuerdos de la Compañía Estatal de Teatro de Coahuila
Yo era un joven de 15 años que no entendía mucho de literatura. En mi escuela, la clase de español era insuficiente, la profesora no exigía leer obras literarias completas y, por supuesto, no nos hablaba de teatro. Así, en el verano de 1980, me inscribí en un taller en la Casa de la Cultura de Saltillo sin muchas expectativas. Se trataba de un curso a cargo de la artista coahuilense Nancy Cárdenas que, para entonces, era muy conocida. Yo la había visto en televisión, en un programa con Zabludovsky en que dialogaba elocuentemente con Silvia Pinal y Elena Poniatowska sobre el papel de la mujer en México, y Nancy había discutido sobre lesbianismo, reconociéndose lesbiana.
Desde la primera sesión del taller, quedé cautivado por la erudita conversación de Nancy y comencé a soñar con ocupar un lugar en ese mundo mágico que la artista abrió para nosotros: el teatro.
Día con día, su presencia era notable. Nancy destacaba por su gran estatura, su sonrisa franca y su cabello entrecano. Trataba a todos con sencillez, compartiendo con nosotros la exigente clase de expresión corporal a cargo de Dunia Zaldívar. Siendo una mujer madura, Nancy demostraba mucha flexibilidad y cumplía sin quejarse la dura disciplina física.
Después, Cárdenas se dirigía a la sala de conversación donde realizaba el trabajo de mesa de la obra a montar: “El jardín de los cerezos” de Chéjov. Con fluidez y sabiduría, Nancy explicaba el teatro universal, luego detallaba las características del drama psicológico europeo encabezado por Ibsen, Chéjov y Strindberg, y finalmente procedía a desbrozar personajes y situaciones dramáticas de la obra en cuestión.
Su profesionalismo la llevaba a analizar cada parlamento y cada intención, pero, además, su erudición le permitía analizar el subtexto: aquello que el autor ruso expresaba por debajo de las palabras pronunciadas y que procedía del contexto económico, la época, el ambiente opresivo previo a la revolución y la oposición entre las clases sociales.
Por mi juventud, no alcancé papel en este montaje sino en uno alterno, también supervisado por ella, pero dirigido por el maestro Ignacio Hernández: “El pájaro azul”, de Maurice Maeterlinck. Entonces, me apuraba a realizar mis ensayos para colarme en los de ella y ver escenas de “El jardín de los cerezos”, obra que se estrenó con éxito en el recién inaugurado Teatro de la Ciudad Fernando Soler de Saltillo.
El trabajo que realizó Nancy fructificó ampliamente pues muchos de los integrantes de su compañía desarrollaron una importante carrera a nivel local como el primer actor de Saltillo, Jesús Valdés (1950 – 2015), el actor René Gil (1947 – 2022) o las actrices Sonia Salum y Marissa Vallejo. También influyó en Jesús Valdez Ramos, quien fuera su asistente de dirección y luego se convirtió en investigador y catedrático de la UNAM. Mención aparte merece Mabel Garza Blackaller que no solo actúa sino también escribe, dirige y produce teatro, siendo su montaje de “El día que pisamos la luna” una de las piezas fundamentales del homenaje “Una guerrillera disfrazada de artista” en 2024.
Homenaje por natalicio y ausencia
En 2024 se cumplen 90 años del natalicio de Nancy Cárdenas, nacida en 1934, y 30 años de su fallecimiento el 23 de marzo de 1994 (misma fecha del fatídico atentado en contra de Luis Donaldo Colosio).
Así, varias instituciones culturales mexicanas se han unido para rendir el homenaje “Una guerrillera disfrazada de artista”, entre las que se cuentan: Cultura UNAM, Museo Universitario del Chopo, Fundación Televisa, Televisa Univisión, CITRU, Universidad Autónoma de Coahuila, Casa La Besana de Saltillo, Museo Arocena de Torreón, Producciones Peregrino, Colmex, CENART.
Las actividades inician con la proyección de “México de mis amores” el 23 de marzo en el Museo Universitario del Chopo, documental que luego se programará en distintos espacios de varias ciudades como Torreón, Monterrey, Puebla, Oaxaca, Xalapa y la Ciudad de México.
En mayo se proyectará “Querida Nancy”, película realizada por Olivia Peregrino en el año 2020 en que se recogen testimonios sobre la artista. Luego, la conferencia performática “Collage Lésbica” recorrerá distintos espacios de la comunidad LGTBQ+ como el foro Somos Voces de la Ciudad de México.
Por su parte, se realizarán en el CENART las jornadas académicas “Escena teatral y política del deseo” dedicadas al 90 aniversario de Nancy Cárdenas.
En octubre se presentará la publicación titulada “A propósito de lunas” que incluye 2 textos dramáticos de Nancy (“El día que pisamos la luna” y “Yo amo la revolución sexual”) en una edición a cargo de la poeta Claudia Berrueto, auspiciada por la Universidad Autónoma de Coahuila.
En noviembre se reestrenará “El día que pisamos la luna”, texto dramático escrito por Nancy Cárdenas, con el grupo teatral Luz del Norte dirigido por Mabel Garza en Casa La Besana de Saltillo, Coahuila, en temporada hasta diciembre.
Finalmente, el Colegio de México prepara una selección de obra poética titulada “Antiguas lesbianas de este valle”, con un estudio a cargo de Elena Madrigal.
REFERENCIAS
Perfil de Facebook “Una guerrillera disfrazada de artista”
Perfil de Instagram “Una guerrillera disfrazada de artista”
Enciclopedia de la literatura en México
Nancy Cárdenas – Detalle del autor – Enciclopedia de la Literatura en México – FLM (elem.mx)
FOTOGRAFÍAS
- Nancy, becaria del Centro Mexicano de Escritores (1968)
- Nancy con Hugo Argüelles
- Nancy Cárdenas en los años 80.
- Nancy Cárdenas en los años 90.
- Busto en la Casa de la Cultura de Parras, Coah.
- Homenaje en Bellas Artes (2004) con Carlos Monsiváis y Carmen Montejo.
- Lectura dramatizada con Pilar Pellicer y Jacqueline Andere (2004).
- Con el elenco de “Los chicos de la banda” (1979).