La designación del exsecretario de la OCDE, José Ángel Gurría, como el encargado de encabezar la elaboración del proyecto de gobierno de la alianza opositora habla por sí misma de la propuesta neoliberal de la coalición PAN-PRI-PRD, que pretende retornar al pasado en el que todo era para beneficio de los más ricos.
Gurría Ordoñez es salinista de sepa y durante el gobierno de Zedillo ocupó la Secretaría de Relaciones Exteriores y la de Hacienda y Crédito Público, para luego pasar a encabezar la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, institución que representa los intereses de los países capitalistas, especialmente Estados Unidos.
Por su falta de popularidad y ser conocido como el “ángel de la dependencia”, por su proclividad a entregar las riquezas nacionales a los extranjeros, Gurría decidió bajarse de la contienda por la candidatura presidencial de la Alianza, pero al dejarlo como el cerebro gris del proyecto opositor, deja al descubierto a la más seria aspirante de su grupo, Xóchitl Gálvez, quien pretende engañar a los mexicanos con su supuesto interés por los pobres.
Junto a Xóchitl pretenden abanderar a la derecha otros 12 anquilosados políticos, a saber: Miguel Ángel Mancera, Jorge Luis Preciado, Santiago Creel, Ignacio Loyola, Beatriz Paredes, Silvano Aureoles, Enrique de la Madrid, José Jaime Enrique Félix, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, Gabriel Quadri, Israel Rivas y Sergio Iván Torres.
Todos deberán darse a la tarea de recolectar por lo menos 150 mil firmas para proseguir en la contienda interna, además de pasar el filtro de encuestas, de las que resultarán tres finalistas, los cuales competirán por la candidatura opositora mediante cinco debates en el mes de agosto y una segunda encuesta de la que se dará a conocer al ganador el 3 de septiembre próximo.
Todo apunta a favor de Xóchitl para representar los intereses oligárquicos.
SUSURROS
Sin duda alguna Porfirio Muñoz Ledo fue un hombre muy inteligente, analítico, y de convicciones de izquierda, aunque en su larga carrera haya dado saltos para atrás, como en su subordinación al régimen foxista, durante el cual fue Cónsul General de México en Boston, Massachusetts.
Tuvo a su favor haber logrado alcanzar el poder adquisitivo más alto del salario mínimo cuando fue secretario del trabajo en el régimen echeverrista, pasó a la historia como el primer legislador que interpeló, a un presidente de la República, en el último informe de gobierno de Miguel de la Madrid, y de colocar la banda presidencial a Andrés Manuel López Obrador a inicios de este régimen, cono presidente de la Cámara de Diputados.
Vino en desgracia al no poder alcanzar la presidencia de Morena al terminar su último periodo como legislador, lo que hizo criticar al actual gobierno, pero luego atenuó sus señalamientos cuando parecía que le iban a otorgar la embajada de México en Cuba. Tras no suceder esto volvió a la acre crítica.
Político singular de altos vuelos, sin duda representante fiel de lo que es y ha sido el sistema político mexicano.
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