Con un viaje en el que se transitó por las diversas emociones que provocan las piezas musicales y los diferentes sonidos que se pueden generar a partir de los instrumentos de cuerdas, la Orquesta de Cámara de Bellas Artes (OCBA), del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal), ofreció, en el Pabellón Escénico del Jardín Escénico del Centro Cultural del Bosque, la mañana de este lunes 9 de septiembre, una función relajada para personas neurodivergentes, quienes disfrutaron de la presentación.
A la presentación de La función relajada para personas neurodivergentes, asistió la directora general del Inbal, Lucina Jiménez López, así como representantes de la Fundación Amparo Serrano, Fundación M. Rita Scarafile, Fundación Renace, Casa Vicente García Torres, Centro de Atención a la Niñez, Casa Hogar Tlalpan, Casa Cuna Coyoacán y Centro de Atención para la Niñez en Contexto de Migración, quienes reconocieron el trabajo de la orquesta con una ovación de pie, levantando las manos y girándolas, como se hace en el lenguaje de sordomudos, además de expresar sus emociones de forma efusiva.
En esta ocasión, la presentación de la OCBA integró siete estrenos en México: The Golden Gateway, de Brian Balmages; Elementa, de Soon Hee Newbold; Storm Flight, del compositor Steve Parsons; Strange twists and Devious turns, de Peter Sciaino; Metal Rhythmico, creada por Kirt Mosier; The Sound of a Sound, de Richard Meyer, y Perseo, de Soon Hee Newbold.
A través de ellas y bajo una breve explicación, a cargo de Luis Manuel Sánchez, director artístico de la OCBA, los asistentes compartieron sentimientos de alegría, nostalgia e incertidumbre, además de percibir elementos naturales como el agua, el viento y el fuego, además de estar inmersos en otras expresiones, como la literatura.
En entrevista, el director musical, Luis Manuel Sánchez explicó que la presentación forma parte del ciclo social La OCBA contigo, el cual tiene más de 30 años con el objetivo de acercarse a públicos que no tienen la posibilidad de asistir a los conciertos regulares de la agrupación por diversas condiciones.
“Con estos programas queremos romper con los protocolos y mostrar que la música es inclusiva, universal y para todos. Son conciertos gratuitos y éste es el último de cuatro que ofrecimos”.
Explicó que la programación para este tipo de funciones está conformada por un repertorio adecuado, accesible y fácil de digerir, y con una guía que acompaña la presentación. “Es el momento en el cual podemos acercarnos a los públicos vulnerables, llevándolos de la mano para que tengan un mejor entendimiento de lo que escuchan. En este caso fueron piezas descriptivas que permiten descubrir a cada uno de los compositores y romper la barrera que hay entre orquesta y público”.
Añadió que con estos programas y los resultados obtenidos se refleja el trabajo exitoso que se ha logrado, cumpliendo con el propósito de acercarse a los públicos vulnerables. “Afortunadamente, muchos de estos conciertos han generado que los que asisten sigan a la orquesta en sus actividades habituales y si no la conocían, ya están más cerca de nosotros a partir de los conciertos y las redes sociales”.
Puntualizó que las agrupaciones del Inbal tienen entre sus principales funciones llevar cultura a toda la sociedad sin distinción alguna, porque el arte ofrece muchos beneficios emocionales, físicos e intelectuales. “Quien está cerca del arte es más consciente de sí mismo y de su entorno, y gracias a esa sensibilidad que se desarrolla se puede ser más empático. Las expresiones artísticas enaltecen el espíritu humano y una vez que te atrapan forman parte de la vida”.
Las funciones relajadas, organizadas por la Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Inbal, a través del Programa de Inclusión Social, Diversidad e Igualdad de Extensión Cultural, son presentaciones artísticas que se realizan en los mismos espacios del Instituto, en un entorno de comprensión y empatía para personas neurodivergentes, y con la participación de diversas compañías del Inbal.