Remedio ancestral para el
cierre de caderas post-parto
Después del parto la cadera queda con una disposición distinta a lq que tenía antes del parto. El embarazo y el parto producen varios desajustes anatómicos, entre ellos, la apertura de los huesos de la pelvis.
Esto es natural y el cuerpo de la mujer está preparado para ello y es importante que valorar el estado físico de la cadera antes del parto y después del mismo. Los desajustes producidos durante el parto afectan no solo a los huesos, sino que también a músculos y ligamentos.
Después del vientre, las caderas son, entonces, la parte del cuerpo que más tiende a crecer con el embarazo. Debido a que el organismo depende de esta importante reserva de grasa para suplir sus necesidades energéticas, es poco lo que se puede hacer para prevenir el aumento de su tamaño.
La proporción de su crecimiento también se puede deber a factores raciales y de constitución: en las morenas esta zona tiende a ser más ancha que en las mujeres de raza blanca.
El cierre de caderas post-parto se recomienda por medio de fajas, un remedio ancestral ideal después del parto que ayuda a restablecer la elasticidad de los tejidos de la piel, sirve de soporte para el abdomen, el vientre, la espalda y modela la silueta del cuerpo.