Los astros o planetas para la astrología tienen una importancia básica....
Cada signo del zodiaco tiene un regente planetario - un planeta que se cree que funciona notablemente y que está cómodo y se siente "como en casa" en el signo. Los regentes planetarios de los signos fueron asignados por los griegos en una proporción simétrica y equilibrada. Cada planeta regía dos signos, uno positivo y otro negativo, a excepción del Sol y la Luna, que regían solo un signo. Los regentes planetarios se distribuyen justamente entre los signos según el orden de su distancia observada desde la Tierra, como se ve en el diagrama.
El Sol rige el signo de Leo, la época más calurosa del año cuando está al máximo de su fuerza. La Luna rige el signo de Cáncer que comienza con el solsticio de verano, marcando el cambio de dirección del Sol. Moviéndose hacia afuera en velocidades decrecientes de órbita, Mercurio es el siguiente, el que tiene la regencia de dos signos: Géminis y Virgo. Luego sigue Venus, rigiendo los signos de Tauro y de Libra. Después Marte que rige a Aries y a Escorpio, luego Júpiter que rige a Piscis y a Sagitario. Finalmente, en el momento más frío y oscuro del año, Saturno, como el planeta más lento, rige los signos de Acuario y Capricornio. Los planetas exteriores son relativamente nuevos allegados y han sido añadidos a este modelo: Plutón como el regente moderno de Escorpio; Urano como el regente moderno de Acuario y Neptuno como el regente moderno de Piscis.
Los astros o planetas para la astrología tienen una importancia básica. Estos son los protagonistas de los eventos celestiales, y se deben tomar en cuenta como si de personajes se tratara. Los signos zodiacales se deben entender como energías o colores que tiñen a los astro-planetas. Es decir, que los astros serán los personajes y los signos serán su carácter. En una carta astrológica se deben ver siempre así para no confundirse.
Teniendo en base esa manera de entender a los astros, a continuación se entenderá que estos personifican asuntos básicos de la psique del Hombre.
A nivel personal
Individualidad: SOL el Rey Interior. En la anatomía oculta del ser humano es el Alma misma, que es la Esencia o Chispa Divina.
Emotividad: LUNA la Reina Interior. En la anatomía oculta del ser humano es nuestro Ego relacionado con el Cuerpo Vital que sostiene nuestro cuerpo físico, influyendo en los instintos, emociones con respecto a la supervivencia, nutrición, etc.
Inteligencia: MERCURIO el Sirviente Interior. En la anatomía oculta del ser humano es nuestra Memoria relacionada con el Cuerpo Etéreo, la capacidad de interactuar, asimilar y comunicación básicas.
Afectividad: VENUS La Doncella Interior. En la anatomía oculta del ser humano es nuestra Afectividad relacionada con el Cuerpo Emocional, la capacidad de sentir afectos, sentimientos que nos llevan a la sociabilidad, a las relaciones sociales y afectivas, al amor de la pareja, al placer de las cosas, al lujo y comportamientos sensuales y sibaritas, también incita al deseo, tanto material como sensual.
Voluntad: MARTE El Guerrero Interior. En la anatomía oculta del ser humano es nuestra Voluntad relacionada con el Cuerpo Mental, la capacidad de actuar debido a la Conciencia, a conquistar e ir tras proyectos y todo tipo de voliciones, entiéndase que para cartas astrales de mujeres heterosexuales y hombres homosexuales Marte es representativo del hombre en su sentido sexual y por tanto es su ideal sexual.
A nivel social
Afectividad social: JÚPITER el Sacerdote Interior. En la anatomía oculta del ser humano es el Cristo Interior, el que nos guía hacia un conocimiento espiritual, el que nos eleva y busca llevar a un desarrollo espiritual para nuestra mejoría como humanos.
Voluntad social: SATURNO el Juez Interior. En la anatomía oculta del ser humano es el Espíritu Cósmico, una de las cualidades de Dios, que nos juzga y es la verdadera conciencia, éste es el Juez interior.
A nivel colectivo
Intuición: URANO el Sabio Interior. En la anatomía del ser humano representa a una cualidad de Dios como el Hijo Cósmico, o bien es el Verbo, éste influye pues creativamente por encima del plano humano, los cambios para la humanidad en general, los progresos y revoluciones sociales y colectivos de una generación.
Misticismo: NEPTUNO el Mago Interior. En la anatomía oculta del ser humano es la cualidad de Dios como el Padre Cósmico, por tanto es la relación que una generación tiene con la fuente original, con el Absoluto, por tanto su influencia es totalmente espiritual.
Transmutación: PLUTÓN el Chamán Interior. En la anatomía oculta es el Inframundo, aquel lugar en donde yacen las pulsiones inconscientes que han sido depuradas y eliminadas, es como la Papelera de Reciclaje Cósmica de nuestro Sistema Solar.
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