Lluvia dorada, una
parafilia segura
Dentro de los comportamientos o parafilias sexuales, la "lluvia dorada", también llamada urolagnia, asocia la excitación y el placer sexual al hecho de orinar sobre la pareja o a ser orinado por ella.
La urolagnia se manifiesta en diversos grados: desde sentir placer al oler orina, hasta beberla. Quienes llevan a cabo esta práctica a menudo gustan también de orinar en público u observar cómo orinan otros.
Quienes son asiduos a la urolagnia aseguran que al tratarse de una situación tan privada y personal como orinar y compartirla con su pareja, se crea una conexión más íntima.
La "lluvia dorada" es una de las parafilias sexuales que involucran juego recíproco de poder y sumisión en donde un miembro de la pareja es el dominante y el otro, el dominado. Esta situación se da incluso en los animales, que marcan su territorio con orina para ahuyentar a sus enemigos o atraer una pareja.
La golden shower tiene la ventaja de no causar embarazos, pero sobre todo, de brindar protección contra el VIH, pues la orina no transmite el virus. Además, en comparación con otras prácticas de mayor riesgo sanitario tales como la coprofilia (excitación sexual por las heces), la urolagnia parece inofensiva.
Si se considera que el sexo seguro es cualquier práctica sexual donde se evita que el semen, la sangre o el flujo vaginal de una persona entren en contacto directo con los órganos sexuales, boca, recto o heridas abiertas de otra persona, la golden shower podría ser considerada como tal.