Hueseros y sobadores, medicina
aprendida empíricamente
Los hueseros atienden principalmente los problemas de luxaciones, fracturas, dolor de articulaciones, esguinces y torceduras. En cambio los sobadores acomodan y corrigen ciertas malformaciones, sobando básicamente sobre el miembro afectado o inflamado.
Aunque generalmente la función de los hueseros está enfocada a la atención de fracturas quebraduras, luxaciones, torceduras y otros trastornos del sistema músculo-esquelético (tales como dolores musculares, golpes, hinchazones, calambres, tendones encogidos, órganos desplazados, hernias o relajadas, etc.), existen particularidades regionales en cuanto a la gama de padecimientos que atienden.
Por lo general, el aprendizaje de estos especialistas es de tipo empírico, aunque en algunas regiones del país su disposición y sensibilidad se consideran innatas. El “don” les es otorgado por los dioses a través de los sueños, y el aprendizaje técnico se efectúa por transmisión oral, observación, experiencia y práctica. Son la sobada, el masaje y las friegas, así como ciertas manipulaciones exploratorias realizadas con fines diagnósticos o destinadas a “emparejar” y “acomodar” huesos u órganos que se considera están fuera de su lugar. Con la finalidad de inmovilizar la parte afectada, la vendan y entablillan, y generalmente aplican cataplasmas y vilmas preparadas con productos vegetales y animales para desinflamarla. Además, dependiendo de sus conocimientos, algunos hueseros utilizan otras técnicas.
Los sobadores no tienen capacitación profesional formal, pero dicen poder curar articulaciones dañadas, dolores de espalda y otras dolencias. El tratamiento consiste en masajear la zona dolorida, aplicar medicinas o cremas con hierbas y a veces sugerir cambios en la dieta.
El sobador generalmente aprende su oficio de alguna persona anciana de la familia, que lo introduce en el arte de los masajes como aprendiz informal.
Para mejorar el proceso de sanación algunos sobadores también usan hierbas y lociones que se compran con frecuencia en una botánica. Estas tiendas minoristas venden medicinas tradicionales y artículos espirituales, como pociones para el amor, figurillas, santos, velas para orar y otros objetos que se cree que tienen poderes mágicos. Los sobadores compran en las botánicas, al igual que las personas que buscan remedios baratos para tratar males como el dolor de estómago y la artritis.