Aptrende a cerrar ciclos
y sanar tu vida
Tengo que borrar mi pasado para poder escribir mi futuro
Lluvia López
Al acercarse el fin de año empezamos a escribir los proyectos del nuevo año, ¿pero qué paso con los que hicimos el año anterior?, seguramente algunos quedaron pendientes otros no fueron como pensábamos y empezamos a guardar heridas, sinsabores, pena, resentimientos, etc.
Es buen momento entonces, para antes de hacerte propósitos, cerrar ciclos. Recuerda que es necesario cerrar algunas puertas no por orgullo, sino porque no llevan a ninguna parte.
Ahora nos llegan nuevas oportunidades para crear abundancia en nuestras vidas. En ese sendero es primordial aprender a cerrar ciclos. Bien sea en los temas laborales, de relación de pareja, en las finanzas, con los amigos, la familia en fin.. Es fundamental tomar conciencia de que la vida es un constante fluir. Que el universo está en permanente movimiento. Y en ese movimiento, es clave sanar esas situaciones del pasado, para experimentar la plenitud y la felicidad en tu vida futura.
Para cerrar ciclos es necesario que crees una conversación poderosa con aquel ser supremo, universo, Dios, en lo que tu creas y te introduzcas en la magia del perdón contigo mismo, antes de pensar en los demás. Esas historias del pasado, te han permitido llegar a donde estas. Sin ellas, tal vez no tendrías las vivencias del hoy.
Libérate: crea una lista con todos aquellos recuerdos y sentimientos que deseas sacar de tu vida, toma la decisión de liberarte de aquellas cosas que te afectan en el presente.
Celebra la vida: agradece, reconoce cada pequeño y gran regalo que hayas recibido a la largo de tu vida y en especial en este año.
Suelta el remordimiento: no mires hacia atrás para resaltar tus errores ni para pensar en lo que pudiste hacer o lo que pudo haber sido, piensa que los errores forman precisamente parte de tu proceso de crecer y alcanzar el éxito, las metas , avanzar. Empieza a asumir que todo es aprendizaje.
Sana tus relaciones personales: toma la decisión de perdonar a todas aquellas personas que de una u otra manera afectaron y si es necesario pide perdón.
Regresa la familia: regresa los amigos, a las personas que tú amas, es ocasión de reencontrarte con los tuyos, olvídate de lo que te hicieron y busca un acercamiento, tiende tu mano y celebra con ellos en esta época, es una oportunidad de cerrar ciclos y comenzar de nuevo.
Todo está bien y va estar mejor: siempre tienes que saber eso. A pesar de todo lo duro que haya sido la situación que atravesaste, no importa, haz el esfuerzo de sonreír y saber que lo que sea que estés pasando también pasará. ¡Libérate de todo lo para que empieces más liviano y tengas más espacio para poder crear cosas positivas y para poder traer todo las bendiciones que la vida tiene para ti!
Recuerda que no es sano dejar cosas pendientes. El hecho de comenzar de nuevo, permite que le imprimamos enfoque a las cosas y se comience con frescura. Crea nuevos hábitos. Para ello, es necesario que trabajes en aquietar tu ego.
Tú eliges. Y recuerda: ¡a sonreír, agradecer y abrazar tu vida!
¡Gracias por existir, compartir y estar!
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